Querer más, poder ser recordados con orgullo, poner la felicidad de los demás por encima de la propia o elegir cómo y con quiénes queremos compartir la vida y el tiempo que tenemos, son algunos de los temas que We live in time pone sobre la mesa.
El formato es conocido y el drama nos encanta, sin embargo, We live in time, la nueva película protagonizada por Andrew Garfield y Florence Pugh va más allá de lo esperado, entregando un filme que nos llega al corazón.
En la pantalla
Tobias (Garfield) un hombre recién divorciado conoce a Almut (Pugh) en el momento menos pensado, literalmente, pero la química entre ambos es innegable y lo que comienza como una amistad, o quizá algo más, pero sin mayor compromiso, tarde o temprano se convierte en la mejor historia de amor. No obstante, como en todo buen drama, la trama se complica; es entonces cuando apelan a un elemento básico (el cual no mencionaremos para no dar spoilers), pero que -sin menospreciarlo- pasa a un segundo plano, eligiendo enfocarse en muchos otros momentos de la vida en familia que comparten los protagonistas.
En mi mente
“Está bien no estar bien, pues en ocasiones es demasiado lo que vivimos y sentimos”, es uno de los diálogos que se me quedó grabado y que, aunque anteriormente lo he escuchado, en ese momento, resonó como nunca antes. Y aunque claro que pensé que cualquier que fuera mi problema en aquel instante no se comparaba para nada con el que veía en pantalla grande, más tarde comprendí que debía validar mi sentir, pues sea cual sea nuestro problema, por muy grande o chico que parezca, es nuestro, y basta con ello para que pensemos y actuemos al respecto.
Asimismo, el filme que expone tanto el reto de enfrentarse a una batalla que parece perdida de antemano, así como el deseo de dejar una huella en el tiempo que nos queda, nos recuerda que a diario tenemos la oportunidad de hacer algo distinto, de cambiar nuestro destino, de animarnos a lo nuevo y de aprovechar el tiempo que tenemos.
Finalmente, el filme nos habla de soltar, algo que a algunos nos cuesta un poco más que a otros, pero que tarde o temprano, todos nos enfrentamos al mismo dilema. Y es que soltar es dejar atrás aquello que fuimos, lo que sentimos y soñamos, a quienes nos acompañaron y hasta el futuro que idealizamos. Pero en ocasiones, soltar es la única manera de poder continuar.
We live in time expone de una forma muy orgánica y honesta momentos claves de la vida de cualquiera, con las dudas, inseguridades, oportunidades y emociones que se presentan y a las que nos enfrentamos a diario, dando como resultado una crónica de la vida y el amor con la cual todos podemos sentirnos identificados y, ante todo, motivarnos a disfrutar del tiempo que tenemos.
Deja un comentario