A la fecha sabemos que si algo enriquece toda experiencia sensorial es la fusión de culturas, esto lo hemos visto principalmente de la mano de propuestas gastronómicas, pero el sentido del gusto e incluso el olfato van más allá de los alimentos y para ello, la mixología es otro gran ejemplo.
Bajo esta premisa, fue hace unos días que se suscitó una fusión única en la Ciudad de México nada menos que con Miami. Dos ciudades que son referentes en el continente americano, que están llenas de sabor, de ritmo y de vida se unieron en una noche muy especial.

EAST Miami y Sugar en CDMX
EAST Miami llevó por primera vez la energía de su icónico rooftop bar Sugar a la Ciudad de México con Una Noche en EAST: A Sugar Pop-Up. La Terraza Everest se convirtió en un espacio donde se encontraron dos escenas cosmopolitas: la vibra de Brickell y el estilo urbano de la capital mexicana.
Desde Miami llegaron tragos insignia como Hot Gossip, con notas ahumadas de mezcal poblano infusionado y un twist cítrico de hallabong y toronja clarificada, y Such Great Heights, un cóctel efervescente que fusiona whisky japonés con piña y pimiento amarillo. Creaciones diseñadas para sorprender al paladar local y conectar con el lenguaje culinario de México.

La colaboración con Handshake Speakeasy
Reconocido como el mejor bar del mundo, añadió un acento local con creaciones como un tequila infusionado con aceite de oliva, manzana y romero servido en copa y decorado con aceituna, y otro a base de vodka con frambuesa y crema de cacahuate acompañado de un pequeño sándwich de chocolate relleno de mermelada de fresa. Estas incorporaciones aportaron un matiz sofisticado, reforzando el carácter internacional de la experiencia, consolidando la propuesta como un diálogo entre dos de las escenas de mixología más influyentes del momento.