La hemos visto en pantalla y el escenario dando vida a todo tipo de personajes. Ahora, Adriana Louvier llega a la pantalla chica de la mano de Netflix en la serie Pecados Inconfesables, para contar una historia un poco más oscura, llena de matices y muy compleja que, aunque consigue mantener el misterio, deja al descubierto su maestría en actuación.
Por el gusto de encarnar personajes muy reales
“Mi personaje es una antagónica, es oscuro o claro oscuro, pero el detonante o el motor que la lleva a hacer cosas, considero que es algo que la hace muy humana”, nos confiesa con emoción, pero sin dar mayor información respecto al personaje que interpreta en Pecados Inconfesables. Y es que esta serie que está por estrenar en Netflix el 30 de julio, es el thriller perfecto que invita al espectador a conocerlo a fondo, querer indagar, formular teorías e ir descubriendo, capítulo a capítulo, todo lo que esconde esta gran historia.
“A mí me dijeron Thriller y me llamó mucho la atención, pues es de mis géneros favoritos. Más adelante, cuando leí los primeros capítulos me enganché, además, me encanta que mi personaje está lleno de secretos”, expresa con pasión, al tiempo que asegura sorprender a la audiencia. “Es muy distinto a lo que había hecho antes y en un momento dado será todo lo contrario a lo que puede esperar el espectador”.
“Es muy interesante contar una historia desde el dolor”, Adriana Louvier
“En esta historia hay muchos personajes que están en búsqueda de venganza, personajes que viven de traiciones y de bajas pasiones. Mi personaje es uno de ellos y me encanta”. Y es que aunque resulta que el personaje de Adriana es un enigma durante gran parte de la historia, poco a poco podemos conocer el porqué de su misterio, el pasado que oculta y los pecados que no quiere confesar.
Sin embargo, lo cierto es que más allá del misterio y suspenso, Pecados Inconfesables, serie de la que forma parte Adriana Louvier también parte de emociones más fuertes como el dolor. Al respecto, Adriana nos cuenta: “Es muy interesante contar una historia desde el dolor. Y aunque la gente procura ser mejor persona siempre, hay algo innato al ser humano que nos hace vivir y experimentar tanto el lado más luminoso como el más oscuro. Claro que como actriz, es muy lindo siempre interpretar a personajes luminosos, sin embargo, son los personajes más oscuros los que consiguen llevarte a otro lugar en el que puedes jugar y experimentar más”, concluye.
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